Hace unos días leí un artículo sobre la estupidez artificial en el que se hablaba sobre los algoritmos que gobiernan nuestra vida en esta era digital que nos rodea, y de cómo su comportamiento afecta a nuestro día a día debido a los errores de bulto que cometen . Leí con cierta inquietud que los algoritmos confunden , entre otras cuestiones, una tortuga con un rifle, una persona de color negro con un gorila y que no son capaces de distinguir , con lo que eso supondría para los coches autónomos, una señal de stop si esta tiene una pequeña pegatina en medio. Por ejemplo, cuando compramos un artículo por Internet los algoritmos siguen mostrándonos machaconamente publicidad del mismo producto hasta varias semanas después porque, sencillamente, no saben que ya lo hemos adquirido debido a que esta operación de compra es privada y por tanto los algoritmos la desconocen. Es ahí donde demuestran su estupidez. Hay quien define los algoritmos como unos mec...