En el día a día de los clubes modestos, que son generalmente la gran mayoría, los entrenadores tenemos que hacer frente a situaciones inesperadas que requieren de soluciones rápidas y eficaces. Una de las situaciones más frecuentes es la falta de jugadores que nos rompe de alguna manera nuestra programación del entrenamiento, pero hay otras quizá todavía más complejas de gestionar, como es la de tener que compartir pista con otro equipo de manera inesperada. De repente nos encontramos con 12-14 jugadores en media pista y una sola canasta. ¿Cómo responder a algo así? ¿Qué hacer en el entrenamiento que nos permita tener ritmo y trabajar diferentes conceptos en tan poco espacio? De alguna manera este tipo de situaciones nos ponen a prueba como entrenadores y nos enseñan a reaccionar ante los imprevistos, cosa que también nos puede pasar en un partido. Aunque seamos entrenadores organizados y metódicos, no debemos descartar una cierta "improvisación" y tener preparadas